La actividad económica se ha visto duramente golpeada por la pandemia, un hecho que provocará una caída del Producto Interior Bruto (PIB) jamás visto en décadas. Salamanca no se va a librar, aunque el único consuelo reside en que, de acuerdo a las previsiones de Unicaja Banco, el descenso será inferior al que experimente el resto de Castilla y León y por debajo de la predicción del Banco de España para el conjunto del país. El importante peso del sector agrario en la provincia ayuda a mitigar los efectos económicos del coronavirus.
El estudio de Unicaja Banco prevé que, en el escenario más favorable, que implica una vuelta a la normalidad en la segunda mitad del año de un importante número de sectores, la bajada del PIB rondaría el 6,4%. En el peor escenario, con un retraso en el regreso a la actividad, la disminución podría alcanzar el 9,7%. La debacle es importante, ya que supondrá el cierre de muchas empresas y la pérdida de miles de puestos de trabajo, pero al menos la situación salmantina resulta menos negativa que la de la Comunidad.
Al resto de provincias de la Región les espera una mayor caída del PIB, según el análisis de Unicaja Banco, mientras que la media regional se situará en una bajada del 7,6% en el mejor escenario y de un 10,8% en el peor. El Banco de España, para el conjunto del país, augura un descenso de entre el 9,5% y el 12,4%, aunque la autora del estudio de Unicaja, Felisa Becerra, especifica que este organismo ha hecho su última predicción con datos más actualizados.
Sobre el por qué Salamanca podrá resistir mejor el embate de la crisis que otras provincias de Castilla y León, Felisa Becerra tiene claro que se debe al sector agrario. «Su peso es más relevante que en otras zonas y se trata de una actividad que, aunque también se ha resentido por la pandemia, ha aguantado mejor que otras», apunta. Sobre la posibilidad de que la economía vuelva a crecer a medio plazo, señala que el consumo lo hará en 2021, si no surgen imprevistos, y que el ritmo de crecimiento del PIB no será «tan rápido como en un principio se esperaba».