Blackstone, la mayor sociedad de inversión del mundo, el fondo de inversión más afectado por el Real Decreto sobre el alquiler anunciado este viernes, advierte contra los efectos de las medidas anunciadas.
La filial en España del gigante estadounidense, presidida por Claudio Boada, ha enviado un comunicado con reflexiones de este último en las que subraya que dicho Decreto, por el que se aumentan los plazos de los contratos del alquiler de tres años hasta los siete años para las personas jurídicas, «discrimina sin razón alguna a los operadores profesionales del alquiler, con normas específicas para ellos y limitando sus garantías como arrendadores».
«En definitiva», añade, «se trata de una normativa muy restrictiva en comparación con nuestros homólogos europeos y que va a suponer más tensión al alza de precios en el mercado y una reducción de la oferta».
«La nueva norma paralizará otra vez el mercado del alquiler hasta que sea convalidada o no», advierte Claudio Boada
En opinión del primer representante de Blackstone en España, la ampliación de los plazos del alquiler, las limitaciones a la revalorización de las rentas y la reducción de garantías en los alquileres de renta libre «van a suponer que los precios de salida ofertados sean más altos para adaptarse al nuevo Decreto, lo que va a perjudicar principalmente a los arrendamientos más asequibles (por debajo de 600 euros)».
Segundo intento
El Consejo de Ministros aprobó el pasado mes de diciembre un Real Decreto que modificaba la Ley de Arrendamientos Urbanos, entre otras leyes, y aumentaba el plazo legal mínimo en el que el inquilino puede permanecer en la casa arrendada, al igual que el anunciado hoy.
Ese decreto tan solo estuvo vigente 35 días, hasta que la norma fue tumbada en el Congreso. El Gobierno no logró el apoyo del partido liderado por Pablo Iglesias, que exige además que los Ayuntamientos puedan limitar los precios máximos de alquiler en determinadas zonas.
«Con este Real Decreto-ley, el Ejecutivo habrá cambiado en menos de tres meses hasta tres veces la normativa del mercado del alquiler, lo que ha aumentado enormemente la inseguridad jurídica de los ciudadanos que son propietarios o inquilinos de una vivienda», advierte ahora Claudio Boada.
«Sería más conveniente la tramitación de un proyecto de ley», dice Blackstone
«La nueva norma conducirá, como ya ocurrió con el anterior decreto, a unanueva paralización del mercado del alquiler hasta que se produzca su convalidación o desaprobación en el Congreso en los próximos 30 días», destaca.
Inseguridad jurídica
El fondo estadounidense sostiene que el nuevo decreto aumenta la inseguridad jurídica, lo que «afectará a la inversión extranjera en Españaen el conjunto de sectores productivos».
La puesta en marcha de nuevas medidas para el mercado del alquiler «requiere de un análisis exhaustivo y de un debate entre todas los operadores de este mercado, condiciones que no se han dado en esta ocasión», opina Boada, quien indica que sería «más conveniente la tramitación de un proyecto de Ley«.
«El mercado del alquiler es importante para la economía de muchas familias, sirve como vehículo de ahorro y renta a más de cuatro millones de familias y es la alternativa vital de 10 millones de inquilinos, un colectivo que se va a ver perjudicado, sin duda alguna, por esta medida», afirma.
Blackstone ha comprado el ladrillo del Popular, hipotecas de Catalunya Caixa, la socimi Hispania o el grupo de juego Cirsa
«Esperamos que el resto de grupos parlamentarios representados en las Cortes hagan un ejercicio de responsabilidad y apuesten por una legislación más positiva de cara a mejorar el funcionamiento del mercado», termina diciendo el primer directivo de Blackstone en España.
26.000 millones en España
Blackstone ha ido comprando grandes paquetes de hipotecas que se corresponden con más de 100.000 viviendas en alquiler a la banca española en los últimos cinco años. El pasado año llevó a cabo la mayor operación inmobiliaria del año en el mundo, la adquisición de los activos inmobiliarios de Banco Popular, por 10.000 millones de euros, junto a Santander.
En marzo de 2014 Blackstone se quedó, por 3.615 millones de euros, con 40.000 hipotecas problemáticas de Catalunya Caixa, iniciando así el desatascamiento de las cuentas de la banca española por el lastre inmobiliario, y una competencia feroz entre los grandes fondos por hacerse con esos activos.
La firma ha adquirido la Socimi Hispania, por 2.000 millones; el 50,01% de la Socimi de pisos en alquiler Testa, por 947 millones. También se ha hecho con Cirsa, una de las compañías líderes de la industria del juego en Europa, una operación valorada en unos 2.000 millones