La evolución de la ejecución presupuestaria en relación con la Regla de Gasto ha experimentado un fuerte crecimiento, especialmente a nivel estatal.
La Intervención General de la Administración del Estado ofrece mensualmente los indicadores adelantados que permiten estudiar el desempeño de las Administraciones en materia de estabilidad presupuestaria. De momento, las cifras conocidas para el primer cuatrimestre de 2019 confirman un franco retroceso en materia de reducción del déficit.
En términos de caja, el periodo comprendido entre enero y abril de 2018 se cerró con una desviación de 832 millones de euros, mientras que 2019 ha arrancado con un desfase de 8.496. Si estudiamos este diferencial en relación con el PIB, encontramos que el déficit de caja del primer cuatrimestre ha pasado del 0,07% al 0,68%.
Tampoco mejora mucho la perspectiva si se estudia el saldo primario en caja. Entre enero y abril de 2018, este indicador arrojaba un saldo positivo de 11.410 millones de euros. En 2019, durante el mismo periodo, dicha cifra se había reducido significativamente, hasta los 2.969 millones. En porcentaje del PIB, esto supone pasar del 0,94% al 0,24%.
Si medimos el diferencial empleando la metodología de la Contabilidad Nacional en vez de ceñirnos al diferencial en términos de caja, vemos que el déficit ha subido de 5.895 a 8.195 millones de euros o, lo que es lo mismo, ha pasado del 0,49% al 0,65% del PIB. Si estudiamos el saldo primario, encontramos que el primer cuatrimestre de 2018 arrojó un superávit de 2.306 millones, frente al déficit de los 482 millones con el que ha arrancado 2019 (es decir, de un saldo positivo del 0,19% del PIB a un déficit del 0,04%).
Según apunta la Intervención, «los ingresos no financieros del Estado han sido de 41.747 millones, un 15,4% inferiores a los de 2018. En relación con el PIB, los ingresos equivalen al 3,33%, es decir, 0,75 puntos porcentuales menos que en 2018″. Ajustando los datos para tener en cuenta el efecto calendario, la nota es igualmente pesimista: «con dicho cálculo, los ingresos disminuyen un 4,2%, hasta situarse en 47.249 millones. La recaudación procedente de impuestos y cotizaciones, incluyendo los ingresos desplazados a mayo, es de 39.219 millones, un 6,1% inferior a la de 2018. Dentro de estos, los ingresos por IRPF bajan un 2,2%, los del Impuesto sobre Sociedades un 39,9% y los del IVA un 6,5%».
Sánchez se salta la Regla de Gasto
Los informes para el conjunto de las Administraciones Públicas cubren de momento el primer trimestre del año y permiten conocer la evolución de la ejecución presupuestaria en relación con la Regla de Gasto. Con las elecciones europeas, nacionales, regionales y municipales a las puertas, este indicador ha experimentado un fuerte crecimiento, especialmente a nivel estatal.
Así, el gasto del gobierno central ha pasado de 26.718 millones de euros en el primer trimestre de 2018 a 29.671 millones entre enero y marzo de 2019. Esto supone un crecimiento del 11,1% y representa una variación al alza de 2.953 millones de euros. Por tanto, el aumento de gasto de Sánchez en los meses previos a las elecciones de abril ascendió a 160 euros por familia.
En cuanto a los gobiernos autonómicos, la subida fue menor, pero también superior a los niveles previstos por la Regla de Gasto. Comparando los 33.252 millones de gasto del primer trimestre de 2018 con los 35.236 millones de enero, febrero y marzo de 2019, se observa un repunte de 1.984 millones de euros, es decir, del 6%.