• Las previsiones contemplan una caída de hasta el 15% para este año
  • Se espera una recuperación mucho más rápida que desde la anterior crisis

Desde 2008 la depresión de precios se alargó durante seis años

El mercado inmobiliario de España sufrirá su segundo shock en menos de una década. Los expertos prevén una caída del precio de la vivienda en 2020 entre el 6,5% y el 15%. La intensidad de la crisis será parecida a la experimentada en los peores momentos de 2012, pero se espera una recuperación mucho más rápida gracias a que en esta ocasión no hay un gran stock de viviendas sin vender y que el nivel de endeudamiento es mucho más bajo que en el anterior periodo.

La peor cara de la crisis del coronavirus todavía no se está reflejando en el precio de la vivienda. Pero ya hay serios indicios de que el golpe en el sector inmobiliario va a ser duro. La hibernación que sufrió la economía desde mediados de marzo también afectó a las operaciones que se realizaron en ese mes y en el siguiente para contener la pandemia. Según los notarios, la compraventa registró una caída récord del 71% en abril. De momento, los precios están aguantando el desplome de actividad que arrastra el sector. En el mes de mayo, el precio de la vivienda siguió subiendo a un ritmo anual del 1%, según el portal inmobiliario idealista, una de la referencias del mercado de segunda mano. Mientras los datos que maneja la tasadora Tinsa, una de las tasadoras más importantes del país, el mes de mayo cerró al mismo nivel que abril y registró un incremento interanual del 3,6%.

Pero se comienza a observar diferencias por regiones teniendo en cuenta la incidencia del coronavirus. Navarra y Castilla y León, dos de las comunidades con las tasas de infección más elevada, mostraron el recorte de precios más acentuado en mayo. Los precios cayeron de media un 2,4% y un 1,7%, respectivamente. Y en Madrid, donde ha sido el mayor foco del virus en España, los precios retrocedieron un 1,4%. Mientras en las regiones menos afectadas la valoración de los inmuebles siguen creciendo. Andalucía registra subidas en mayo del 6%, en Baleares del 4,2% y en Murcia, un 3,8%.

Sin embargo, los expertos prevén que estos niveles no duren mucho tiempo teniendo en cuenta el colapso que ha atravesado el sector y el difícil contexto económico que se abre para los próximos meses, en lo que el Gobierno ha llamado nueva normalidad. «Estamos en el prólogo de un declive que solo se hará evidente en septiembre», avanza Gonzalo Bernardos, experto inmobiliario y profesor de la Universidad de Barcelona, a Bloomberg. «Para fin de año, los precios habrán caído un 12%, porque esta será la crisis económica más aguda que hemos tenido».

El coronavirus ha llegado en plena recuperación del ladrillo después de la última gran crisis económica. Para muchas estadísticas que sondean el sector muchos mercados ya se habían recuperado los niveles previos a 2008, cuando el estallido de la crisis financiera pinchó la burbuja inmobilaria. Madrid y Barcelona han liderado la remontada. Aunque el INE todavía estima que el precio medio de la vivienda todavía está a un 16% de los máximos alcanzado a medidos de 2007.

La vivienda se ha convertido en un buen termómetro de la salud de la economía española. Los activos inmobiliarios son la principal inversión de las familias españolas y determinante para establecer el nivel de riqueza. El 80% de las familias tienen vivienda en propiedad, aunque desde la anterior crisis el porcentaje ha bajado y se ha abierto el mercado de alquiler entre las generaciones más jóvenes.

«Estamos en el prólogo de un declive que solo se hará evidente en septiembre»

Para Funcas, una de las casas de análisis económico de España, predice que este año el descenso del precio de la vivienda será del 10%. Mientras la consultora inmobiliaria RR de Acuña & Asociados reduce la caída al 6,5%. Los expertos destacan que los principales factores que influyen en el precio de la vivienda es el crecimiento económico y la perspectiva de empleo. Todavía es pronto para determinar la profundidad de la actual crisis, y lo que es más importante, la posterior recuperación. Aunque los economistas ya tienen asumido que lo peor de la crisis quedó atrás en los meses de marzo y abril, el acumulado del año va a reflejar un serio destrozo de la economía. El Banco de España no descarta que el PIB este año se hunda hasta un 15%, si hay rebrotes y continúan algunas medidas de contención, con un fuerte crecimiento del desempleo. Podría escalar por encima del 20%.

Pese a las oscuras perspectivas económicas, las caídas previstas para el mercado inmobiliario no contemplan los salvajes descensos vividos durante la anterior Gran recesión. Como ahora, España fue uno de los países europeos que peor lo pasó. La crisis financiera originada en EEUU se convirtió en el país en una crisis inmobiliaria pagando años y años de excesos propiciado por el crédito barato. Una de las consecuencia fue más de seis años de ajuste en los precios. Los precios acumularon una caída de casi el 40%, con períodos de desplome del 15%, especialmente en 2012.

«Los precios de las vivienda de segunda mano caerán entre un 6% y un 7% este año, pero se recuperan mucho más rápido», pronostica Miriam Goicoechea, directora de investigación residencial de CBRE en España. La recuperación del mercado inmobiliario duró seis años después de la doble recesión que vivió España. En este tiempo, el sector ha corregido mucho de los desajustes de la época del boom. Tanto empresas como familias, han reducido su nivel de endeudamiento. Y el sector bancario es mucho más prudente a la hora de conceder hipotecas. La experta además destaca que ha bajado el stock de vivienda sin vender. No hay prisa por vender como pasó en la anterior crisis, por lo que no existe la necesidad de grandes ajustes en los precios.

Fuente: El Economista

https://www.eleconomista.es/vivienda/noticias/10601932/06/20/Al-mercado-inmobiliario-le-espera-un-infierno-pero-el-ajuste-del-precio-de-la-vivienda-no-sera-tan-salvaje-como-en-la-ultima-crisis.html