La construcción fue el motor económico de Salamanca durante los primeros años de este siglo XXI. Nuevos edificios surgieron como setas en el extrarradio de la capital y municipios del alfoz, incluso del segundo cinturón de pueblos como son San Cristóbal de la Cuesta, Castellanos de Moriscos o Carrascal de Barregas, por poner algunos ejemplos. Pero la crisis económica hizo estallar la burbuja inmobiliaria y el sector se hundió hasta cotas insospechadas. Hasta autónomos que llevaban toda la vida trabajando pasaban meses sin chaperones que realizar. Poco a poco el sector se ha recuperado, pero durante los últimos meses vuelve a registrar un auge que lleva aparejado un incremento inmobiliario que también ha hecho encender las alarmas.

La lista del paro bajó en julio gracias a la construcción. La Agrupación Empresarial de la Construcción y sus Servicios Auxiliares de Salamanca (Aconsa), integrada en la Confederación de Empresarios de Salamanca (CES), destaca que este descenso de desempleados coincide con la temporada de mayor trabajo y contrataciones en el sector, que comienza en primavera y se mantiene los meses de verano.

Su presidente, Javier Tamames, asegura que “las cifras publicadas son positivas pero podrían ser mejores si no hubiera escasez de mano de obra cualificada”. En este sentido, asegura que “en estos momentos y desde hace ya meses, la construcción está experimentando una recuperación que no se corresponde con la oferta de trabajadores del sector. No hay oferta para la demanda actual”.

Un movimiento que lleva aparejado el resurgimiento de las inmobiliarias. La recuperación de la construcción también está propiciando que el negocio de las inmobiliarias vuelva a estar de moda en Salamanca. Antes del estallido de la burbuja, llegó a haber 186 de este tipo, que después se quedaron en apenas el veinte por ciento. Ahora vuelven a abrirse inmobiliarias y los carteles de compraventa de viviendas y alquiler vuelven a llenar escaparates.

Y es que, por ejemplo, la compraventa de viviendas está registrando durante los últimos meses los mejores datos en la provincia charra en cinco años, según la Encuesta de Transmisiones de Derechos de la Propiedad elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Mientras, según el informe mensual de precios de venta de www.pisos.com, la vivienda de segunda mano en la provincia de Salamanca en julio tuvo un precio medio de 1.522 euros por metro cuadrado. Esta cifra registró un ascenso del 8% respecto al año pasado, un 3% en el caso de la capital, hasta 1.891 euros, la más cara de Castilla y León.

También sube el precio del alquiler, entre los más caros de España. El informe semestral de precios de alquiler de www.pisos.com muestra que el piso tipo de alquiler en Salamanca registró en junio de 2018 una superficie media de 90 metros cuadrados y una renta media de 661 euros mensuales, lo que supuso un incremento del 9% respecto al año pasado.

Así, encontrar una vivienda en Salamanca vuelve a ser una misión complicada, sobre todo para alquiler, con habitaciones por más de 300 euros al mes. Así, los desahucios vuelven a repuntar en la provincia charra, sobre todo relacionados con el alquiler. ¿Es sólo una situación pasajera o el inicio de una nueva burbuja inmobiliaria?

 

Fuente: https://www.noticiascyl.com/salamanca/local-salamanca/2018/08/04/regresa-la-burbuja-inmobiliaria-a-salamanca/