El Hospital de Salamanca acaba de activar un estudio a nivel nacional que podría suponer un vuelco en el manejo de los pacientes con cáncer tratados con fármacos que pueden asociarse con complicaciones cardiacas.
La cardióloga Ana Martín recuerda que “los nuevos fármacos han logrado aumentar la tasa de curación del cáncer, pero algunos son medicamentos que pueden producir efectos secundarios en el corazón, tanto durante su administración como a medio y largo plazo”.
Los cardiólogos entienden que es fundamental la detección precoz de estos problemas para empezar a tratarlos cuanto antes para que el paciente pueda completar su tratamiento oncológico.
Actualmente, cuando el oncólogo o el hematólogo sospechan una posible complicación, el paciente es derivado de inmediato a las consultas de Cardiología. La novedad que propone el Ensayo Clínico Cartier es realizar un seguimiento muy estrecho de estos pacientes con riesgo de desarrollar problemas cardiológicos y compararlo con la forma en que se manejan actualmente. “A un grupo de enfermos se les evaluará antes de comenzar el tratamiento y continuar los controles a los 3 meses, 6 meses, 1 año, 2 años, 3 años, 4 años y 5 años”, explica Martín García.
La vigilancia es tan intensa que los cardiólogos podrían detectar cualquier anomalía tan pronto como surgiera. En la actualidad no existen evidencias científicas que demuestren que un seguimiento programado tenga beneficios para el enfermo, pero tampoco se había ejecutado un ensayo clínico como este para salir de dudas. De hecho, el proyecto está financiado por una de la reconocidas becas FIS del Instituto Carlos III a través del IBSAL.
Entre los especialistas hay opiniones dispares. Desde quienes defienden que la forma en la que se está tratando actualmente a los pacientes es ya muy buena; a los que confían en que un seguimiento detallado puede aportar mejoras para el paciente. “El beneficio de este método es que les empezaríamos a tratar antes y lograríamos el objetivo de que el paciente reciba su tratamiento anti-tumoral con el menor riesgo cardiovascular”, ensalza Ana Martín.
El Estudio Cartier incorporó la pasada semana al primer paciente del Hospital de Salamanca, pero aspira a reclutar un total de 514 pacientes de toda España, representando a los 14 centros hospitalarios que van a participar.