Malas noticias para los vecinos de una treintena de municipios de la provincia de Salamanca, ya que el año comienza con una revisión del valor catastral de sus bienes inmuebles que podría incrementar el recibo del IBI al que tienen que hacer frente en 2020.
El valor catastral es la base de este tributo, ya que sobre él se aplica el tipo impositivo que fijan los consistorios. Si ese tipo no ha sido bajado en el mismo porcentaje en que sube el valor catastral, los propietarios de inmuebles urbanos deberán pagar más por ellos este año en el IBI.
La actualización del valor catastral es un proceso que han de solicitar los ayuntamientos en la primera mitad del año. A final del verano o en otoño se publica en el Boletín Oficial del Estado el listado de las localidades a las que se les ha aprobado el trámite. Sin embargo, hay que esperar a los Presupuestos del Estado para el siguiente año para saber el porcentaje en qué subirán o bajarán, ya que es allí donde el Gobierno aprueba los coeficientes en función del año en el que se aprobó la última ponencia de valores.
En la treintena de municipios en las que sube el valor catastral, los vecinos acabarán pagando más en el recibo del IBI si el ayuntamiento no ha decidido tocar a la baja el tipo impositivo. En caso de no haberlo disminuido para 2020 o hacerlo en un porcentaje inferior al del aumento del valor catastral, el impuesto subirá para los propietarios de inmuebles urbanos.
La Ley recoge que el valor obtenido tras la revisión catastral no se aplique de manera íntegra el mismo año, sino que esa subida se reparta en incrementos progresivos de un 10 por ciento durante los próximos 10 años, cuando se computa el 100 por 100.
Por otra parte, ha habido otros once municipios de la provincia que han abortado la revisión catastral después de haberla solicitado anteriormente, por lo que a los vecinos de esos municipios no les afectará en el recibo de 2020.